A pesar del llamado que hizo el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, Jorge Romero, para que las personalidades políticas de Acción Nacional no acudan a votar el próximo domingo, en Chihuahua la situación es diferente.
Tanto Maru Campos, como el alcalde Marco Bonilla y el secretario general de Gobierno, Santiago de la Peña, han asegurado que acudirán a votar de manera responsable, incluso han señalado que ya tienen sus candidatos preferidos por los que marcarán su voto.
Aunque el PAN estuvo siempre en contra de la Reforma al Poder Judicial que contempló la elección popular de jueces y magistrados, en Chihuahua han dejado claro que no permitirán que Morena se lleve todo a mansalva, por lo que no sólo sí votarán los lideres, sino que seguramente, activarán sus maquinarias para intentar que algunos de sus candidatos lleguen a los cargos a los que aspiran.
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El gobierno federal ya tiene lista la maquinaria para llevar sus acarreados para votar este próximo domingo, para elegir con el voto “democrático” a los nuevos integrantes del Poder Judicial, magistrados y jueces.
Por cierto, también aquí en Chihuahua comentan que hay unos listados de 10 personas cada uno, ya sean amigos o familiares, que llevarán a votar el próximo domingo.
El mismo estilo de acarreos que popularizó al PRI en la década de los 2000 y que denominaron “redes ciudadanas”, es decir, una forma de multiplicar exponencialmente los votos a favor de algún candidato, utilizando el convencimiento de quienes ya gozan de algún beneficio laboral dentro de los gobiernos.
Sin duda habrá mucha abstención por parte de la ciudadanía, y los únicos “ganones” serán aquellos que puedan movilizar a sus “afiliados”…
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El que se voló la barda fue Humberto “El Pato” de las Casas, quien en un intento de limpiar lo que ya está totalmente embarrado, dijo que la agresión ocurrida en contra de un profesor del Colegio de Bachilleres plantel 8, no fue la causante de la separación del cargo del docente víctima de un brabucón.
Por el contrario, dijo que lamentablemente, un día después de ocurrida la agresión, una gran y casi increíble coincidencia, marcó el fin de su contrato de interinato, es decir, aunque no hubiera pasado nada, al siguiente día ya no le tocaba ir a la chamba.
Para colmo, aseguró que el diagnóstico de autismo del profesor agredido, no es cierto y que incluso, no existe un estudió médico que así lo avale, aunque al parecer, sí existe ese documento el cual fue ignorado por el personal administrativo del Cobach.
La cereza del pastel, fue cuando dijo que el brabucón, si bien fue suspendido sólo algunos días, ya no iría más a ese plantel ya que sus padres decidieron sacarlo del Bachilleres e inscribirlo en otra institución, al parecer privada, es decir, acepta que no hicieron su chamba, pero por obra del espíritu santo, todo se acomodó.
